Bizcocho marmolado especial San Valentín❤️

En un bol mezclamos las harinas junto con la levadura y una pizca de sal.

En otro bol añadimos los huevos, la esencia de vainilla, 200gr de queso fresco batido y el endulzante al gusto (eritritol, stevia, pasta de dátiles...).

Con estas cantidades y este molde me sobró masa para hacer cuatro magdalenas.

Batimos con unas varillas hasta integrarlo todo bien y veamos que la mezcla está blanquecina.

Poco a poco añadimos la mezcla de harinas. Mejor hacerlo de forma tamizada e ir integrando de manera envolvente con ayuda de una espátula. De manera opcional añadimos también ralladura de limón.

Cuando tengamos una mezcla homogénea separamos en dos, pero no mitad y mitad. Una de las partes debe de tener algo menos de cantidad. Ahí añadimos los otros 100gr de queso fresco batido y el cacao en polvo.

Personalmente, a la mezcla que añadí el cacao tuve que echarle un poco más de endulzante osea que mejor probar antes.

Una vez que tengamos ambas mezclas, montamos el bizcocho. Para ello utilicé un molde de silicona en forma de corazón el cual pincelé primero con un poco de aceite de oliva.

La idea inicial era ir poniendo una cucharada de cada mezcla de forma alterna, pero al ser una masa muy densa, decidí poner primero la masa "blanca" hasta la mitad del molde y después la de cacao.

Con el horno precalentado, horneamos durante unos 30 minutos a 180 grados. Como el tiempo depende de cada horno y del molde utilizado, es mejor que pasados unos 20 minutos pinchemos el bizcocho con una aguja. Cuando veamos que sale limpia, podemos retirar el bizcocho.

Dejamos enfriar y desmoldamos.